jueves, 11 de abril de 2013

Vísteme despacio...

VÍSTEME DESPACIO
Exposición fotográfica Susana y Benito.
(Primera Parte)

Cuando andamos por la calle… ¿dónde estamos? Cuando
estamos en el súper… ¿dónde estamos? Cuando hablamos con otros… ¿dónde estamos? ¿Cuánto vemos de camino al trabajo?
¿Cuánto no vemos? ¿Cuánto se nos escapa? ¿Hacia dónde
vamos por este camino?

Vísteme despacio es un proyecto que invita a parar, a desacelerar
pies y manos, a abrir la mirada, los sentidos, a sentir las
plantas de los pies, la tierra que nos aguanta cada día, a mirar los árboles, oler, escuchar con atención, estar con los demás.
Este es un trabajo por entregas, sin prisas, paso a paso,
baldosa a baldosa… y para compartir. Aquí tenéis la primera
parte. Gracias.


Benito Alcón (alconlopez@gmail.com)    Susana González (susgonrod@hotmail.com)

Conociendo a  las autoras:


¡Hola! Me llamo Susana y soy de Sevilla. Os cuento aquí un poquito de mi camino…

Me licencié en Filología Inglesa por la Universidad de Sevilla, aunque mi último año lo hice en
Irlanda, en University College Dublin. Después de eso, recibí una beca para estudiar en Holy Cross, EE.UU, donde amplié estudios y trabajé dando clases de español. Una vez acabada la carrera, y tras una etapa de viajes y de algunos años enseñando idiomas, decidí, con mucho miedo, meterme en el mundo de la danza contemporánea; el movimiento siempre me apasionó.

Empecé mi formación para bailarines aquí en Sevilla, y después de un año, inevitablemente, tuve que marcharme. Me mudé a Barcelona donde estuve cinco años formándome y también creando y moviendo alguna que otra pieza propia (por ejemplo, el dúo Distancias, seleccionado en los certámenes Stripart y en el V Certamen Coreográfico de Sabadell). Una de mis asignaturas de danza fue siempre el yoga, camino que me fue enamorando y enamorando… hasta decidirme a hacer una formación para profesores de yoga. Por supuesto, continúo estudiando, haciendo cursos y practicando yoga y meditación cada día; se podría decir que soy lo que se llama una “yoguini”. Tengo la gran suerte de impartir clases de yoga en Diksha Yoga, un lugar muy especial en La Alameda de Hércules, donde también resido, y soy muy feliz.
Y junto con los viajes, las lenguas, el movimiento y el yoga, he practicado siempre la escritura de poesía. Acabo de escribir un libro que espero poder publicar. Y este sería el punto y final del resumen, bastante largo, de un pasado que ya no existe más que en imágenes en mi cabeza y
que, realmente… ¿qué más da? Gracias por leer esto. Un gran abrazo.


Mi nombre es Benito Alcón y actualmente paso treinta y ocho horas a la semana corriendo por
los pasillos oscuros de un multicine proyectando películas. Hubo un pasado más glorioso en mi
curriculum que dice que me licencié en Comunicación Audiovisual o que me hice Técnico Superior
de Imagen. Y que viajé, me formé y trabajé durante cinco años entre Irlanda e Italia, haciendo de la
fotografía y el diseño gráfico mi principal sustento. Una historia tan frenética, larga y enrevesada
sin mucho interés que terminó hace poco más de tres años y que me trajo de nuevo a Sevilla.

De vuelta a casa y tras un largo periodo de reflexión llegué a la conclusión de que era el momento de hacer lo que quería. Así que de un tiempo atrás he dejado de alimentar a ese monstruito ambicioso de éxito laboral y hoy por hoy puedo presumir de dedicar las ciento treinta horas restantes de la semana a hacer lo que me gusta. La música, y en concreto el estudio del clarinete, junto con una práctica regular de yoga, son ahora mis dos grandes referentes.
El resto del tiempo leo, veo pelis, quedo con los amigos, medito, cuido mis plantas, bajo al pueblo, etc. Y lo que es más importante y da sentido a todo esto, me he reconciliado con la fotografía, que ya libre de toda carga laboral, me está llevando por nuevos caminos que espero sean alimento para el alma.

lunes, 8 de abril de 2013

Y de tapa un retrato!

Durante la semana aniversario de El Barcón, nuestra amiga Elvira realizó un taller de pintura. 
El resultado:  un puñado de retratos que muestran las mejores sonrisas de los allí presentes.


Gracias a todas las personas que cada dia nos apoyan. Dos años juntas y que sean muchos más.  
¡Nos vemos por El Barcón!